LA YUNTA DEL TÍO ROQUE

Araba el tío Roque

con su yunta de dóciles vacas,

con la Triguerona,

con la Temeraria

(Del poma Surco arriba, surco abajo del poeta José María Gabriel y Galán)

    Estos versos con los que comenzamos el artículo de hoy, muestran perfectamente la importancia que las vacas de trabajo tenían para el labrador. No eran simples animales, sino que eran compañeras de trabajo que tenían nombre propio.

Yunta de vacas.

Navacepeda de Tormes (Ávila).

(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

    Las vacas nacían y se criaban en casa. Cuando eran novillas, comenzaba su proceso de doma unciéndolas al yugo junto a otra vaca más mayor para que fuese aprendiendo a trabajar y poco a poco iba convirtiéndose en un valioso animal de trabajo que, además proporcionaba una cría todos los años y leche para el consumo familiar o para la elaboración de queso y mantequilla.

Pareja de vacas Tudancas.

(c) Miguel Alba.

    Durante la noche, las vacas dormían en el corral de la casa o en la casilla o casillo situados al lado de la vivienda con el fin de tenerlas vigiladas y atendidas en todo momento. Toda la familia trataba con gran cariño a las vacas de labor. Cuando una se vendía porque ya era vieja, su marcha era llorada como si hubiese muerto una persona, pues durante 15 ó 16 años había formado parte de la vida de la casa.

Isabel López y Juan Manuel Yuste.

Barajas de Gredos. (Ávila).

Yunta de vacas de raza Avileña-Negra Ibérica, variedad bociblanca.

(c) Silvestre de la Calle García.

    Durante siglos, las vacas fueron utilizadas para realizar todo tipo de trabajos, pero cuando se requería más fuerza o se realizaban larguísimos recorridos con los carros cargados, se sustituían las vacas por bueyes, machos adultos castrados que eran mucho más fuertes que las vacas y más dóciles que los toros.

Yunta de bueyes de Juan Manuel Yuste.

Barajas de Gredos.

Yugo fabricado por Alexis Hernández Llorente.

(c) Juan Manuel Yuste Apausa.

    Los toros enteros o sin castrar, podían utilizarse también para trabajar, aunque su uso estaba más restringido, principalmente a zonas de Andalucía y Canarias.

Toros Castellanos de la Axarquía (Pajunos).

Muy empleados para el trabajo en Andalucía.

(c) Francisco Porras.

    Pero ¿se utilizan actualmente vacunos para trabajar en España? Sí. Ya no es necesario su uso salvo en regiones muy aisladas debido a que la mecanización ha llegado hasta el último rincón del país, pero son muchos los ganaderos que se resisten a que se pierdan las tradiciones heredadas de sus antepasados y realizan grandes esfuerzos para conservarlas.

Yunta de bueyes con carro de hierba.

(c) José Antonio Uriarte.

    Así, en el norte de España, en el Sistema Central, en Andalucía o en Canarias, por citar sólo algunos ejemplos, aún se utilizan las vacas, los bueyes y los toros para realizar trabajos y actividades de carácter folklórico.

Frecuentes son las competiciones de arrastre de pesos o el tiro de carretas en fiestas y romerías así como la recreación de oficios tradicionales como la trilla o el arrastre de madera.

Fiesta de la trilla en Barajas (Ávila)

(c) Silvestre de la Calle García.

    Este breve artículo, pretender servir de modesto homenaje a todos aquellos que luchan por conservar la tradición de trabajar con yuntas de vacas, bueyes o toros permitiendo así que muchos disfrutemos de ello y recordemos las historias que nos han relatado nuestros abuelos.

José Antonio Uriarte con su yunta de bueyes.

(c) José Antonio Uriarte.

Fdo: Silvestre de la Calle García.