domingo, 30 de abril de 2023

LA CABRA BLANCA DE RASQUERA

España cuenta con una gran variedad de razas caprinas autóctonas, muchas de las cuales se encuentran en peligro de extinción debido a su bajo censo y a su reducida área de distribución.
Una de ellas es la CABRA BLANCA DE RASQUERA, raza autóctona reconocida de manera oficial hace pocos años aunque es conocida desde tiempo inmemorial.

Rebaño de cabras Blancas de Rasquera.
(c) Rafa Serra.


DENOMINACIÓN.
Recibe su nombre de su capa totalmente blanca en épocas pasadas aunque hoy sea mayoritariamente berrenda y de la localidad de Rasquera (Tarragona), centro de cría de la raza.
A comienzos del siglo XX era conocida simplemente como cabra Blanca o cabra de monte.

Cabra Blanca de Rasquera.
(c) Rafa Serra.

CARACTERÍSTICAS GENERALES.
Agrupa animales de proporciones medias con tendencia al alargamiento, formato medio y perfil cefálico recto o ligeramente convexo. Cuernos muy desarrollados en ambos sexos con forma de espiral, arco o retorcidos. La capa predominante es la berrenda en negro, seguida de la blanca, la berrenda en crema y la tricolor.

Rebaño de cabras Blancas de Rasquera.
(c) Rafa Serra.

Cabeza:
Bien proporcionada y con perfil frontonasal recto o ligeramente convexo con frente ancha y plana.
Ojos a flor de cara de color amarillo o anaranjado.
Orejas grandes y caídas.
Cuernos de gran desarrollo en ambos sexos pudiendo tener forma de espiral alargada (tipo prisca/falconeri), forma de arco (tipo aegagrus) o formas retorcidas hacia la cara.

Cabeza de un semental.
(c) Rafa Serra.

Cuello:
Largo y estilizado en las hembras y más potente en los machos, como ocurre en todos los caprinos y especialmente en los más primitivos.
Es generalizada la presencia de mamellas en la garganta.

Detalle de la cabeza y el cuello de una hembra..
(c) Rafa Serra.


Tronco:
Ancho y profundo, especialmente en los machos, con cruz ligeramente destacada, línea dorsolumbar recta o un poco ensillada y grupa corta. Cola corta, erecta y de nacimiento bajo.

Extremidades:
Fuertes, musculosas y de longitud media.
Buenos aplomos y articulaciones bien definidas. 
Las pezuñas son grandes y fuertes, pigmentadas o no dependiendo de la coloración del animal.

Lote de animales de ambos sexos.
(c) Rafa Serra

Ubre: 
Bien implantada, recogida  y ligeramente cubierta de pelos. Al ser una raza eminentemente cárnica, la ubre no adquiere un gran desarrollo.
La tipología de la ubre permite a estas cabras transitar por zonas de matorral y piedras sin sufrir heridas ni rasguños.

Testículos:
Normalmente desarrollados.

Cabra en periodo de lactación.
(c) Rafa Serra.

Piel, pelo y mucosas:
Piel gruesa y elástica.
Pelo corto, áspero y grueso.
Mucosas de tonalidad variable en función de la capa variando desde las sonrosadas en los individuos blancos a negras en los individuos oscuros.

Capa:
Variable con predominio de la berrenda en negro, seguida de la enteramente blanca, la berrenda en crema y la tricolor.
En el caso de los ejemplares berrendos en negro se distinguen varias capas:

- Bragada: franjas negras a ambos lados de la cara. La tripa es clara y en el espinazo presenta dos pequeñas manchas negras.

- Fabada: dispersión variable de manchas blancas y negras.

- Blava: Tonalidad grisácea por combinación de pelos blancos y negros.

Conjunto de animales berrendos en negro.
(c) Rafa Serra.

En el caso de los ejemplares berrendos en crema, se distinguen también diversos tipos:

- Sora: color canela fruto de la combinación de pelos blancos y marrones. 

- Rabosa: color que recuerda al pelo del zorro.

- Serrinegra: coloración beige con una lista negra en el espinazo.

Aparecen además combinaciones muy caprichosas y variadas que reciben diversos nombres: capfabats, cappards, capnegres...

Rebaño donde se pueden observar capas diversas.
(c) Santiago Álvarez Bartolomé.

Formato:
Variable en función del sistema de manejo aplicado. Las hembras pesan por término medio entre 50 y 60 kilogramos y los machos entre 65 y 70 kilogramos.

Hembra y macho.
(c) Rafa Serra.

ORIGEN E HISTORIA.
Explicar el origen de las especies y razas ganaderas es sumamente complicado porque existen siempre numerosas teorías que son revisadas constantemente.
Tradicionalmente se ha dicho que la cabra doméstica procede de la cabra de bezoar (Capra aegagrus) que aún habita en estado salvaje en las montañas de Asia Menor. Esta especie habría sido domesticada hace al menos 10.000 años en los montes Zagros.
Sin embargo, otras especies como el marjor (Capra falconeri) también habrían intervenido en la formación de la cabra doméstica actual.
Sea como fuere, las cabras llegaron ya en estado de absoluta domesticidad a la península Ibérica hacia el V Milenio a.C., extendiéndose pronto por todo el territorio.
Los primeros caprinos pertenecían al llamado tronco aegagrus, siendo semejantes a la cabra del bezoar, presentando coloraciones oscuras y cuernos en forma de arco o sable.

Cabra del Asón.
(c) Sergio Arriola Gómez.

En una etapa muy posterior, hacia el siglo VII a.C., los comerciantes griegos introdujeron un nuevo tipo de caprinos de color blanco o claro y cuernos en forma de espiral. Se denominó durante mucho tiempo a estos animales como Capra prisca, si bien hoy en día se sabe que eran cabras domésticas como las ya citadas anteriormente pero fuertemente influenciadas por el marjor por lo que sería más acertado referirse a ellas como cabras de tronco falconeri.

Cabra Blanca Celtibérica.
(c) Santiago Álvarez Bartolomé.

Estos nuevos caprinos se cruzarían con los ya existentes dando lugar a la mayoría de razas actuales aunque algunas conservaron en elevadísimo grado de pureza características de un tipo determinado.
Por ejemplo, razas como la Pirenaica, la Azpi Gorri o la Cabra del Asón conservaron muchísimas características del aegagrus primitivo mientras que otras como la Blanca Celtibérica son claramente de tipo falconeri.
El resto de razas ibéricas son totalmente heterozigóticas y su aspecto es muy variable teniendo más o menos características de los tipos citados desde la Blanca Andaluza que es claramente falconeri con leves influencias de otros tipos a la Verata que guarda más semejanza con el aegagrus.

Cabras Veratas.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Como decimos, esto es sólo una teoría existiendo autores que realizan otras divisiones.
Álvarez Bartolomé, por ejemplo, divide las cabras del norte de la Península en tres grandes grupos:
- Pirenaico:  Pirenaica, Azpi Gorri, Moncaína...
- Céltico: Bermeya, Gallega, Retinta, Charnequeira, Guisandera....
- Serrano Blanco: Blanca Celtibérica, Blanca Andaluza, Blanca de Rasquera....

Cabras Guisandera.
(c) Silvestre de la Calle García.

La presencia de cabras en Rasquera se remonta al menos al siglo XVI apareciendo mencionada en las Ordenanzas de la Villa en 1573.
Sin embargo, no sabemos a ciencia cierta cómo eran aquellas cabras aunque, casi con total seguridad, se trataba de cabras blancas cuyo aspecto recordaba al tipo o tronco falconeri, es decir, caprinos blancos con cuernos en forma de espiral.

Cabras Blancas de Rasquera de tipo antiguo.
(c) Santiago Álvarez Bartolomé.

A comienzos del siglo XX, algunos ganaderos como Agustí Torrens y Miquel Santamaría "El Solsona", introdujeron en sus rebaños ejemplares de la extinta cabra Maellana, caracterizada por su color oscuro y que formaba parte de ese amplio grupo de razas caprinas españolas al que antes aludíamos con influencias del tronco blanco y del aegagrus.
Este cruzamiento dio lugar a las cabras actuales cabras Blancas de Rasquera de capas berrendas, mayoritarias hoy en día frente a las cabras completamente blancas.

Cabras Blancas de Rasquera de tipo moderno.
(c) Santiago Álvarez Bartolomé.

La cabra Blanca de Rasquera corrió la misma suerte que otras razas o poblaciones caprinas de España asentadas en zonas montañosas cubiertas por pastos ralos y matorrales.
En tales terrenos, sólo podían prosperar las cabras y las abejas, pero la Administración estimó que tales montes eran "terreno inculto e improductivo"  debido al sobrepastoreo de cabras y que en el pasado habrían estado cubiertos por los famosos bosques que servían a la ardilla para cruzar la península de punta a punta, cosa que realmente no fue así nunca o al menos no en tiempos históricos.
Por lo tanto, esos montes debían ser repoblados con árboles de crecimiento rápido como los pinos de diferentes especies que permitirían el progreso de la zona.
Naturalmente, las cabras deberían ser eliminadas para permitir el crecimiento de los árboles, provocando que en pocas décadas en España desapareciesen más de 3 millones de cabras.

Cabras en una zona de matorral.
(c) Rafa Serra.

Durante mucho tiempo, la cabra Blanca de Rasquera no contó con reconocimiento oficial, considerándose en unos casos como una variedad de la raza Blanca Celtibérica y en otros casos como simples mestizos.
Por Orden AAA/1357/2016, de 29 de julio, por la que se modifica el Anexo I del Real Decreto 2129/2008, de 29 de diciembre, la raza Blanca de Rasquera fue oficialmente reconocida e incluida en el Catálogo de Razas de Ganado de España.

Cabras Blanca de Rasquera.
(c) Rafa Serra.

IMPORTANCIA Y EXTENSIÓN.
La cabra Blanca de Rasquera ha tenido una gran importancia en las zonas en las que habita, por tratarse de áreas de clima seco y suelos pobres con poca disponibilidad de pastos y mucho matorral. En semejantes terrenos, la cría de vacas es inviable y la de ovejas es complicada.
Ocupa fundamentalmente la zona sur de la provincia de Tarragona, conocida popularmente como Tierras del Ebro y donde se concentra el 80% del censo de la raza.
También se distribuye de manera dispersa por las comarcas de Alt Empordà, Alt Urgell, Baix Llobregat, Berguedà, Garrotxa, Maresme, Priorat, Tarragonés, Vallès Occidental y Vallès Oriental.

Rebaño en su medio habitual.
(c) Rafa Serra.

CUALIDADES Y APTITUDES.
La cabra Blanca de Rasquera es una raza de gran rusticidad, sobria y muy resistente siendo capaz de subsistir y prosperar en terrenos sumamente pobres.
Se destina fundamentalmente a la producción de carne, aunque como todas las cabras ibéricas, si se somete a un manejo adecuado, la producción lechera puede llegar a ser bastante interesante.

Pequeño lote de cabras.
(c) Rafa Serra.

Reproducción.
El 75% de las explotaciones concentra la paridera en los meses de septiembre-octubre con el objetivo de vender los cabritos en fechas próximas a la Navidad, por ser la época en la que hay mayor demanda y consecuentemente mejores precios.
La mayoría de las cabras realizan únicamente un parto al año aunque con una mejora de las condiciones alimentarias se podrían obtener sin problema tres partos en dos años aunque esto puede ser contraproducente teniendo en cuenta el sistema netamente extensivo al que está sometida la raza.
La prolificidad ronda los 140 cabritos por cada 100 partos siendo la tasa de reposición del 15% en hembras y del 21% en machos. 
La relación de hembras/ macho es de 21.

Cabra con cabritillo.
(c) Rafa Serra.

Producción de carne.
La Blanca de Rasquera es una raza especialmente indicada para la producción de carne en medios difíciles.
Los cabritos se alimentan exclusivamente de leche materna desde el nacimiento hasta el sacrificio que tiene lugar a los 30-45 días de vida, presentando una ganancia media diaria de 123 gramos.
En el momento del sacrificio pesan entre 7 y 9 kilogramos y el rendimiento en canal ronda el 55%.

Cabra con cabritos.
(c) Rafa Serra.

Tradicionalmente era muy común la producción de "crestons", machos castrados que eran sacrificados a partir de los 7 ó 9 meses.
Esta práctica era muy común en diversos lugares de España, considerándose la carne de este tipo de animales como una de las mejores del mercado de la época.
Durante siglos y hasta hace pocas décadas, la carne fresca más consumida en el medio rural español fue la de ovino y caprino y mientras que la de los animales adultos o viejos resultaba a menudo seca y dura, la de los machos castrados era mucho más tierna y jugosa debido al mayor contenido de grasa favorecido por la castración.

Cabra con dos cabritos ya crecidos.
(c) Rafa Serra.

Producción de leche.
En el pasado, el ordeño de la cabra Blanca de Rasquera fue relativamente frecuente aunque en ocasiones se mantenían en los rebaños ejemplares de razas de mayor producción como la extinta Maellana citada al hablar del origen e historia de la raza.
Sin embargo, tras el destete de los cabritos, era común ordeñar a las cabras para elaborar un queso de tipo fresco denominado Brossat y que era similar al Mató. Para su elaboración, se calentaba la leche hasta los 50-65º y se añadía cuajo vegetal obtenido herba-col y tras 20 minutos de reposo, se prensaba la pasta en moldes o encellas de madera.
Con el suero sobrante de la elaboración del Brossat, se elaboraba la Colada o requesón, añadiendo para ello un poco de leche y herba-col.

Cabra con cabritos.
(c) Rafa Serra.

EXPLOTACIÓN Y MANEJO.
La cabra Blanca de Rasquera se explota de forma totalmente extensiva en grandes rebaños manejados por el propietario con la ayuda de la familia en las épocas de más trabajo.
Los rebaños aprovechan pastos forestales en zonas de sierra durante los meses de verano o durante todo el año, complementándose su alimentación cuando escasea el pasto o las necesidades de los animales son mayores como ocurre al final de la gestación y durante la lactación.

Rebaño en una zona de sierra.
(c) Rafa Serra.

SITUACIÓN ACTUAL Y PERSPECTIVAS FUTURAS.
El censo actual de la raza asciende en total a 5272 animales de los que 5074 son hembras y 198 machos, repartidos en un total de 20 ganaderías.
La raza aumenta poco a poco su censo pero el número de explotaciones ha descendido en los últimos años.
Como otras razas caprinas en general y en particular aquellas destinadas a la producción de carne, las perspectivas futuras de la raza no son muy esperanzadoras ante la falta de relevo generacional debido a la dura vida del cabrero, a los bajos precios del cabrito y al constante aumento de los costes de producción.

Rebaño de cabras.
(c) Rafa Serra.

EPÍLOGO.
La raza Blanca de Rasquera forma del rico patrimonio ganadero español y sólo por eso ya merece ser conservada.
Al ser una raza adaptada a vivir en terrenos sumamente hostiles constituye un pilar básico para la economía de la zona permitiendo la fijación de población en el medio rural y evitando la emigración pues además de servir como sustento a sus propietarios, proporciona un cabrito de gran calidad que es un auténtico manjar en los restaurantes de la zona sirviendo así para favorecer el turismo gastronómico.
Además cumple una importante labor medioambiental al mantener limpios los montes, esos famosos montes repoblados con pinos hace tiempo, evitando así o al menos disminuyendo el riesgo de sufrir terribles incendios forestales.

Cabra Blanca de Rasquera.
(c) Rafa Serra.

Desde EL CUADERNO DE SILVESTRE esperamos que este artículo sirva para dar a conocer esta singular y, en nuestra opinión, bellísima raza caprina, contribuyendo a su conservación.
Esta labor no está sólo en manos de la Administración sino que los consumidores podemos contribuir consumiendo el exquisito cabrito procedente de esta raza.

Cabra Blanca de Rasquera con su cabrito.
(c) Rafa Serra.

Fdo: Silvestre de la Calle García.
Técnico Forestal.

Agradecimientos y colaboradores.
- Rafa Serra.
- Santiago Álvarez Bartolomé.
- Joan Pellisa Rosich.

Bibliografía y fuentes consultadas:
- Álvarez Bartolomé, S. (2005) La cabra Blanca de Rasquera. Revista FEAGAS Nº 27. 
- Álvarez Bartolomé, S. (2010) La cabra Catalana. Revista FEAGAS Nº 36.
- Guía de Campo de las razas autóctonas españolas. (2009) Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.
- Razas de ganado del Catálogo Oficial de España. (2019) Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. 
- Web del Ministerio de Agricultura.

martes, 25 de abril de 2023

SOCIO DE HONOR DE ASCCASÓN

La Asociación de Criadores de Cabra del Asón (ASCCASÓN) de Cantabria ha nombrado SOCIO DE HONOR a Silvestre de la Calle García, técnico forestal especializado en ganadería extensiva y razas autóctonas de Guijo de Santa Bárbara (Cáceres).


ASCCASÓN es una asociación sin ánimo de lucro creada recientemente y cuyos principales objetivos son dar a conocer la Cabra del Asón y fomentar su cría además de lograr su reconocimiento oficial como raza autóctona española.

Logotipo de ASCCASÓN.

La cabra del Asón toma su nombre de la comarca del Asón-Agüera situada al sureste de Cantabria.
Es conocida desde tiempo inmemorial, habitando fundamentalmente en Soba y municipios vecinos donde en épocas pasados el ganado menor tenía mayor importancia que el vacuno debido a que su mantenimiento era más barato y sencillo puesto que las cabras estaban adaptadas a alimentarse todo el año en el monte y para mantener vacas se precisaba tener muchos prados para poder segar y recoger hierba seca en verano que sirviese de alimento al ganado en invierno.

Cabras del Asón de Ladislao Cano Martínez, La Alcomba, Ruesga. 1963.
(c) Fotografía cedida por Gaspar Guas Fernández.

La raza agrupa animales de perfil recto o subconvexo, tamaño medio a grande y tendencia al alargamiento. Cuernos muy desarrollados en forma de arco, de sección elíptica con la cara exterior redondeada y la interior plana, marcando intensamente la quilla.
La capa puede ser mora, corza o labata.
Se explota de forma extensiva para la producción de carne.

Cabra del Asón de capa corza.
(c) Sergio Arriola.

Aunque conocida dentro del área de cría por todos los vecinos, no existía ninguna publicación sobre ella hasta que el 9 de junio de 2022 se publicó en este mismo blog un artículo titulado LA CABRA DEL ASÓN que fue fundamental para el conocimiento de la raza tanto en Cantabria como fuera de ella.
El artículo fue escrito por Silvestre de la Calle García con la inestimable colaboración de Gaspar Guas Fernández, ganadero y experto conocedor de la raza.

Cabra del Asón de capa mora.
(c) Gorka Fernández Fernández.

Este artículo sirvió de base para que la Cabra del Asón figurase entre las razas representadas en el I ENCUENTRO DE RAZAS AUTÓCTONAS AMENAZADAS PRESENTES EN CANTABRIA celebrado en Meruelo (Cantabria) el 23 de septiembre de 2022 y que fue organizado por la Asociación de Criadores de Ganado Vacuno de la Agrupación Pasiega con la colaboración del excelentísimo Ayuntamiento de Meruelo y de las Asociaciones de Criadores de las razas participantes.
El encuentro fue presentado por Silvestre de la Calle García.

I ENCUENTRO DE RAZAS.
Meruelo (Cantabria)
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

En el Encuentro, personas conocedoras de cada una de las razas representadas (vacas Tudanca, Pasiega y Monchina, caballos Hispano-Bretón y Monchino, oveja Carranza Cara Negra, gallina Cántabra y cabra del Asón) realizaron ponencias relativas a cada raza.
En el caso de la cabra del Asón, la ponencia fue realizada por Silvestre de la Calle García.

Diploma de agradecimiento.
(c) Silvestre de la Calle García.

A raíz de este encuentro, la Cabra del Asón comienza a ser conocida por todos los ganaderos de Cantabria, llamando la atención del Consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Cantabria D. Guillermo Blanco y de la Directora General de Ganadería Dña. Beatriz Fernandez.

Doña Beatriz Fernández y Silvestre de la Calle.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Cada raza participante en el Encuentro contaba ya con su Asociación de Criadores correspondiente, a excepción de la cabra del Asón pues como dijimos, hasta este momento era prácticamente desconocida fuera de la zona de cría incluso en la propia Cantabria donde mucha gente pensaba que ni siquiera había cabras.
Surge así la idea entre un grupo de entusiastas cabreros de crear una Asociación de Criadores para evitar que la raza se extinguiese y olvidase.

Gaspar Guas y Adrián Manteca, cabreros, y Silvestre de la Calle.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Tras muchos esfuerzos para informarse de todos los requisitos necesarios para la creación de la Asociación, fue preciso redactar unos estatutos y un prototipo racial de la cabra del Asón, siendo necesarias muchas jornadas de arduo trabajo pero finalmente el 1 de marzo de 2023 ASCCASÓN quedó finalmente constituida como Asociación.
La Directora General de Ganadería sigue mostrando un gran interés por la raza y el pasado 19 de abril se reunió con miembros de la Asociación para conocer más datos sobre la raza y situación, habiéndose realizado para esta reunión una recopilación de testimonios orales antiguos sobre la Cabra del Asón de gran valor histórico puesto que muchos de los cuales se remontan al siglo XIX.

Rebaño de cabras del Asón.
Valcaba, Soba. 1989.
(c) Julio Fernández Peña.

En la primera junta extraordinaria de Socios celebraba el día 9 de abril de 2023 los socios de ASCCASÓN acordaron por unanimidad nombrar a Silvestre de la Calle García SOCIO DE HONOR de la misma.

Acta de la primera junta general extraordinaria.
(c) ASCCASÓN.

Pero ¿Quién es Silvestre de la Calle García para ser nombrado SOCIO DE HONOR DE ASCCASÓN?
Si este blog se llama EL CUADERNO DE SILVESTRE, no es difícil llegar a la conclusión que quien lo escribe es un tal Silvestre.
Así es que me presentaré para los lectores que no me conozcan aún.
Soy Silvestre de la Calle García, hijo de Alonso de la Calle Hidalgo y Vicenta García de la Calle y, como se decía también en los documentos antiguos, nieto por línea paterna de Antonio Leandro de la Calle Jiménez y Visitación Hidalgo Burcio y por línea materna de Juan García García y Marcelina de la Calle Vicente.

Silvestre de la Calle García.
Escritor de El Cuaderno de Silvestre.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Nací en Navalmoral de la Mata (Cáceres) el 11 de agosto de 1988 aunque siempre he vivido en Guijo de Santa Bárbara (Cáceres), pequeño pueblecito ganadero donde durante siglos la base de la economía ha sido la ganadería, teniendo especialmente importancia el ganado caprino de raza Verata.


Guijo de Santa Bárbara, mi pueblo.
Fotografía tomada desde la Finca de Santonuncio.
En ella mis antepasados tuvieron cabras, ovejas y vacas.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Soy técnico superior en Gestión y organización de los recursos naturales y paisajísticos, pero para abreviar semejante título, siempre digo que soy Técnico Forestal especializado, eso sí, en ganadería extensiva y razas autóctonas habiendo realizado estudios sobre diversas razas ganaderas. 
Muchos de estos estudios han sido publicados en este blog desde enero de 2021 siendo imposible citarlos todos por falta de espacio y por no ser el tema de este artículo aunque no nos resistimos a mencionar algunos que han tenido especial repercusión como los de la vaca Avileña-Negra Ibérica y sus diferentes variedades, la cabra Verata, la oveja Castellana, la gallina Pintarazada, el Mastín Español....

Con un cabrito de raza Verata.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Naturalmente, las razas autóctonas de Cantabria o criadas en dicha comunidad desde hace mucho tiempo, también han tenido su espacio en El Cuaderno de Silvestre, desde las vacas Tudanca y Pasiega a las gallinas Pedresa y Cántabra, pasando por el caballo Hispano-Bretón, que aunque no sea estrictamente cántabro tiene mucho peso en la Comunidad (nunca mejor dicho) o el Perro Lobero.

Vaca Tudanca.
(c) Miguel Alba Vegas.

Es difícil comprender sin conocer la historia cómo puede un técnico forestal de un pueblecito ganadero en las estribaciones extremeñas de la Sierra de Gredos, acabar vinculado a la CABRA DEL ASÓN, raza autóctona de los valles orientales de Cantabria.
Dejadme que os cuente.
Todo comenzó en la primavera del 2023 cuando gracias a la ayuda de Áurea Quintial Ortiz se comenzó a escribir un artículo de EL CUADERNO DE SILVESTRE sobre la mítica raza bovina Pasiega. 

Vaca Pasiega.
(c) Ganadería Áurea y Juan Quintial.

Desde el primer momento, Áurea demostró una gran ilusión por el "proyecto" y colaboró activamente conmigo poniéndome en contacto con diversos ganaderos como Sergio Canales García y con Ana Rubio Ortiz, encargada del Libro Genealógico de la raza Pasiega.
Aunque yo ya tenía relación con algunos ganaderos cántabros desde hacía tiempo como luego comentaré, mi estrecha relación con Cantabria y su ganadería tuvo un antes y un después desde que conocí a la gran ÁÚREA QUINTIAL.

Silvestre de la Calle y Áurea Quintial.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Uno de los lectores de aquel artículo que mostró más interés fue sin lugar a dudas Gaspar Guas Fernández, con el que ya había hablado en alguna ocasión a través de una red social, fue a partir de entonces cuando comenzamos a tener más contacto y a intercambiar opiniones sobre las diversas razas autóctonas de Cantabria desde la vaca Pasiega, la única raza bovina autóctona de la península Ibérica especializada en la producción de leche y que tuvo un pasado sencillamente glorioso, hasta el mítico perro Lobero fundamental para el manejo del ganado en los montes cantábricos.

Vaca Pasiega.
(c) Ganadería Áurea y Juan Quintial.

Gaspar me contó que es cabrero y que cría un tipo de cabra conocido en la zona desde siempre. 
Desde el principio, me di cuenta que Gaspar sentía un auténtico amor por esas cabras y cuando me empezó a enviar fotos de ellas, me di cuenta que sin lugar a dudas se trataba de un caprino especial que tenían características totalmente diferentes a las de otras cabras.
Así fue como con la inestimable ayuda de Gaspar, escribí el artículo citado anteriormente y de esa manera comenzó mi relación con la CABRA DEL ASÓN, que ya forma parte de mi vida.

Cabra del Asón de capa lobata.
(c) Mingui Ruiz Herrero.

El artículo interesó mucho a Sergio Canales García, vicepresidente de la Asociación de Criadores de Ganado Vacuno de la Agrupación Pasiega, quien fue el que me propuso acudir al I Encuentro de Razas de Meruelo.
Naturalmente, el objetivo de este encuentro era dar a conocer la situación de las diversas razas ganaderas amenazadas presentes en Cantabria y de una manera especial la cabra del Asón, pero también sirvió para que el blog que escribo, fuese conocido en los círculos ganaderos españoles.

Sergio Canales y Silvestre de la Calle.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Tengo que decir que mi relación con la ganadería cántabra comenzó ya en enero de 2021 cuando se creó el blog de EL CUADERNO DE SILVESTRE pues ya por aquel momento mis principales colaboradores eran mi gran amigo Miguel Alba Vegas, extraordinario fotógrafo ganadero, y que era pareja de la gran Teresa Callejo Fernández (1980-2022) a la que tristemente perdimos hace pocos meses y que me ayudó mucho para escribir artículos sobre la raza Tudanca y su "hermana" la Casina, pero como ella misma decía "lo mejor en Tudancas y Casinas está en Caloca" poniéndome en contacto con Carlos Fidel Vejo que es uno de los ganaderos más importantes de Cantabria.

Silvestre de la Calle y Teresa Callejo.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Por supuesto mencionar a otros muchos ganaderos como Raquel Cayón Campuzano, Diego Ceballos San Miguel, David Almirante, José Sánchez Erice, José Antonio Velasco Crespo, Isaac Díaz, David Almirante, Fernando Martín González, Alejandro López García...y otros muchos que han colaborado conmigo y siguen haciéndolo pues su ayuda es decisiva para este proyecto.

Comiendo en Meruelo con algunos de mis colaboradores y amigos.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Queda por explicar mi amor por las cabras.
Podría pensarse que he nacido y vivido entre cabras, pero no es así puesto que aunque provengo de importantes familias cabreras, cuando yo nací, mis abuelos paternos Antonio Leandro de la Calle Jiménez (1924-2022) y Visitación Hidalgo Burcio (n.1929) ya no tenían más ganado que un burro, el cerdo para la matanza y unas cuantas gallinas,  mientras que mis abuelos maternos Juan García García (1927-2012) y Marcelina de la Calle Vicente (1930-2009) tenían vacas, una yegua y gallinas.

Yo en 1992 con una vaca de mis abuelos.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Sin embargo, mis abuelos nacieron en el seno de familias cabreras y yo crecí escuchando sus historias.
Fueron mi abuelo Juan y sobre todo mi tía Nicolasa Sánchez García (1922-2007), que en los "papeles" era prima de mi abuelo pero de corazón era su hermana, quienes me inculcaron el amor por las cabras, animales que habían sido básicos para el desarrollo y supervivencia de nuestra familia en épocas difíciles.
A ellos, les debo en gran parte mis conocimientos sobre cabras.

Con mi tía Nicolasa y mi abuelo Juan.
CABREROS.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Este nombramiento como SOCIO DE HONOR de ASCCASÓN es para mi un verdadero orgullo y supone un premio a mi trabajo como escritor de EL CUADERNO DE SILVESTRE, proyecto que comenzó en 2021 con intención de dar a conocer aspectos relacionados con la ganadería y la cultura tradicional. 
No puedo terminar sin dar las gracias a todos los socios de ASCCASÓN por este nombramiento, especialmente a su vicepresidente y gran amigo Gaspar Guas Fernández.

Con Gaspar Guas Fernández.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Naturalmente, también tengo que dar las gracias a todos los lectores y colaboradores de EL CUADERNO DE SILVESTRE. Sois muchísimos y sería imposible poner aquí todos vuestros nombres, pero tengo muy presente que esto no hubiese sido posible sin vuestra ayuda y apoyo. Gracias a todos.


Empecé hace menos de un año a luchar por dar a conocer y defender a la Cabra del Asón,  pero ahora lo haré con mucha más razón porque ya me siento un verdadero CABRERO DEL ASÓN.

Cabra del Asón.
(c) Fermín Gómez Pérez.

¡GRACIAS ASCCASÓN!

Fdo: Silvestre de la Calle García.
Técnico Forestal y SOCIO DE HONOR DE ASCCASÓN.

GUIJO DE SANTA BÁRBARA. EL PUEBLO DE VIRIATO.

Guijo de Santa Bárbara es un pequeño pueblo situado en la comarca de La Vera, al noreste de la provincia de Cáceres y en las estribaciones o...