lunes, 4 de abril de 2022

LAS GALLINAS DE CANTABRIA

Cantabria es una región destacada por su patrimonio ganadero autóctono. A menudo, al hablar de ganadería pensamos en vacas, ovejas o cabras y pasamos por alto otras especies sumamente importantes para la vida de los ganaderos como por ejemplo las gallinas.
En Cantabria encontramos dos razas autóctonas de gallina: la Pedresa y la Cántabra.

Gallo y gallinas de raza Cántabra.
(c) Fernando Martín González.

Se trata de dos gallinas parecidas pero diferentes. Efectivamente, ambas presentan plumaje barrado que les da aspecto de "piedras" pero cada una presenta características que la hacen diferente de la otra.

1. LA GALLINA PEDRESA.
Se trata de una gallina de tamaño mediano, tipología ligera y orejilla blanca. Pertenece al Tronco Mediterráneo, presentando características similares a las gallinas del centro y sur de España y del resto de países mediterráneos como Italia.
Las gallinas pesan por término medio entre 1,7 y 1,9 kilogramos mientras que los gallos pesan entre 2,5 y 3 kilogramos.

Gallinas Pedresa.
(c) Áurea Quintial.

Características del gallo.
Cabeza de mediano tamaño con cara lisa y roja, cresta sencilla de tamaño mediano con 5-7 dientes bien definidos y espolón elevado con respecto a la línea del cuello. Barbillas lisas y redondeadas de color rojo vivo. Orejilla mediana, redondeada y de color blanco o crema pudiendo presentar algún moteado en rojo.
Pico mediano, fuerte y de color amarillo o córneo.
Ojos grandes, vivos y redondeados.
Cuello de longitud media, robusto y bien proporcionado.
Tronco bien desarrollado y ligeramente inclinado hacia atrás.
Pecho ancho y profundo.
Cola no muy grande, con hoces alargadas y ligeramente caídas sin barrado en su parte final, por lo que son blancas.
Abdomen recogido y alas estrechas 
Muslos largos y robustos, tarsos no muy gruesos, rectos, proporcionados y de color amarillo.
Presenta cuatro dedos de color amarillo al igual que las uñas.

Gallo Pedrés.
(c) Isaac Díaz Granel.

Características de la gallina.
Similares a las del gallo con las diferencias propias del sexo como ocurre en todas las gallinas.
Son de menor tamaño que los gallos, con cresta más pequeña y sin hoces en la cola. 
La cresta de las gallinas de raza Pedresa es más grande que la de las gallinas de raza Cántabra. 

Grupo de gallinas Pedresas
(c) Isaac Díaz Granel.

2. LA GALLINA CÁNTABRA.
Gallina de tamaño mediano pero mayor que la anterior, de tipo semipesado y con orejilla roja.
Pertenece al Tronco Atlántico, presentando características similares a otras razas de regiones vecinas como Galicia, Asturias o el País Vasco y del resto de Europa Central e Islas Británicas. 
Las gallinas pesan por término medio entre 2,3 y 2,7 kilogramos y los gallos entre 3,4 y 3,9 kilogramos.

Gallo y Gallina de raza Cántabra.
(c) Fernando Martín González.

Características del gallo.
Las características del gallo Cántabro son muy similares a las del gallo Pedrés por lo que no vamos a repetirlas.
En este caso la orejilla es de color rojo al igual que la cara y la cresta.
Al ser un animal de mayor porte, presenta una complexión más fuerte que se traduce en un cuello mucho más potente y robusto, muslos más desarrollados y tarsos más gruesos. 
En cuanto al plumaje, las hoces del gallo Cántabro son barradas mientras que las del Pedrés son blancas.

Gallo Cántabro.
(c) Fernando Martín González.

Características de la gallina.
Similares a las del gallo pero, al igual que dijimos en la Pedresa, con las diferencias propias del sexo como la cresta y barbillas menos desarrolladas y la cola sin hoces.
La cresta de las gallinas de raza Cántabra es pequeña y en posición vertical, pudiendo estar ligeramente caída aunque sin llegar a caer tanto como en las gallinas mediterráneas.

Gallina Cántabra.
(c) Fernando Martín González.

Mientras que la gallina Pedresa presenta el típico plumaje barrado en el que cada pluma presenta bandas negras y blancas, la Cántabra presenta diversas variedades de color:
- Barrada o típica que puede oscilar entre clara y oscura.
- Nevada. De coloración barrada muy clara.

Gallina Nevada (delante) y Típica (detrás)
(c) Fernando Martín González.

En ambas variedades aparecen ejemplares de cuello desnudo o pelado que, como su propio nombre indica, carecen de plumas en el cuello.

Gallo de cuello pelado.
(c) Fernando Martín González.

Nota del plumaje:
El plumaje barrado de las gallinas Pedresas y Cántabras no es simplemente un bonito plumaje, sino que cumple una importante función de mimetismo o camuflaje cuando las gallinas picoteando en pastizales salpicados de rocas pues les permite confundirse con las piedras y ser menos visibles para los depredadores.

Gallinas Pedresas.
Desde lejos o desde el aire, son difíciles de distinguir de las piedras.
(c) Isaac Díaz Granel.


ORIGEN E HISTORIA.

Las gallinas de plumaje barrado, son muy frecuentes en toda Europa tanto Central como Mediterránea.
Es difícil saber cómo, cuándo y dónde surge este tipo de gallinas pero dada su abundancia en Europa Central es posible que fuesen seleccionadas allí y que luego se extendiesen hacia el sur ya en épocas remotas incluso anteriores a nuestra Era.
No sería descabellado pensar que este tipo de gallinas llegasen con los pueblos celtas en el I Milenio antes de Cristo o que fuesen introducidas posteriormente por romanos y visigodos. 

Gallina Cántabra.
(c) Fernando Martín González.

En la Península Ibérica no sólo encontramos gallinas de este tipo en el norte, sino que podemos encontrarlas también en el centro, sur e incluso en las islas Canarias pero con una gran particularidad:
Mientras que en Cantabria y Portugal encontramos razas con este tipo exclusivo de plumaje, en el sur encontramos razas con variedades barradas como la Utrerana andaluza o la Canaria. 
Aunque con ciertas diferencias, encontramos plumajes similares al barrado en razas como la Euskal Oiloa del País Vasco o la Pintarazada de Castilla-La Mancha.
En estos lugares, las gallinas con este tipo de plumaje son conocidas como empedradas (norte de Cáceres), zalarías (Toledo), franciscanas (Andalucía) o jabadas (Canarias). 

Gallinas de raza Pintarazada variedad "Zalaría".
(c) Javier Bernal Corral.

Sea como fuere, estas gallinas son conocidas "desde siempre" en Cantabria aunque hay una gran controversia sobre cuál de las dos razas es la más antigua.
Teniendo en cuenta que en toda la zona norte de España las gallinas autóctonas son de tipo Atlántico (Galiña de Mos de Galicia, Pita Pinta de Asturias, Euskal Oiloa del País Vasco), es más probable que las primitivas gallinas autóctonas fuesen las Cántabras aunque debido a los menores cuidados a los que se sometía a las gallinas en otras épocas, fuesen más pequeñas que las actuales.

Gallo y gallinas de raza Cántabra.
(c) Fernando Martín González.

La Pedresa, más pequeña y de tipo Mediterráneo, posiblemente descienda de gallinas llegadas desde el centro y sur peninsular.
Es difícil, prácticamente imposible, determinar el momento exacto en el que habrían llegado tales gallinas al norte Peninsular.
Una hipótesis puede ser que los carreteros montañeses, una vez terminada la Reconquista y establecidas las rutas comerciales entre la Montaña y la Meseta, llevase gallinas de este tipo desde Castilla a Cantabria.
Otra hipótesis es que ya a finales del siglo XIX, los pastores trashumantes de ovejas Merinas que realizaban los viajes en tren, llevasen consigo gallinas barradas desde las dehesas del sur que influyeron en las gallinas norteñas.

Gallinas Pedresas.
(c) Áurea Quintial.

Sin embargo, a mediados del siglo XX, comenzaron a introducirse razas inglesas y americanas de mayor tamaño y producción como la Plymouth Rock que presenta también plumaje barrado.
Estas gallinas fueron cruzadas con las autóctonas dando lugar a una abigarrada población mestiza.
Cuando a finales del siglo XX, se quieren recuperar las gallinas autóctonas de Cantabria, unos apostaron por la ligera (Pedresa) y otros por la semipesada (Cántabra) considerando cada uno que la raza verdaderamente autóctona era la que habían escogido cada uno

El resultado final es que actualmente encontramos a la Pedresa reconocida como Raza autóctona en peligro de extinción por el Ministerio de Agricultura, mientras que la Cántabra carece, por el momento, de reconocimiento oficial.

Gallo y gallinas de raza Cántabra.
(c) Fernando Martín González.

IMPORTANCIA Y EXTENSIÓN.
Dentro del rico patrimonio avícola español, las gallinas Pedresa y Cántabra destacan por ser las únicas de plumaje exclusivamente barrado.
Son además gallinas muy antiguas, perfectamente adaptadas al entorno en el que vive y que permiten ser explotadas de forma totalmente extensiva o campera en sistemas ecológicos.
Las gallinas Pedresa y Cántabra, aunque autóctonas de Cantabria y distribuidas fundamentalmente por esta Comunidad, pueden encontrarse repartidas en otras zonas del norte peninsular e incluso en puntos más alejados.

Gallo Cántabro de cuello desnudo.
(c) Fernando Martín González.

CUALIDADES.
Ambas razas son muy rústicas y resistentes, estando perfectamente adaptadas al clima húmedo y fresco de la región.
Son capaces de buscar su propio alimento picoteando alrededor de las casas y en los prados.
Las Pedresas son de temperamento más vivo como todas las gallinas ligeras.

Gallo Cántabro en un prado junto a las vacas.
(c) Fernando Martín González.

PRODUCCIONES.
En las producciones, también se diferencian ambas razas.
La Pedresa es una raza de aptitud ponedora que produce entre 150 y 200 huevos dependiendo del sistema de explotación. 
Manejadas en sistemas extensivos tradicionales sin alimentación complementaria, pondrán alrededor de 150 huevos anuales y si reciben un poco de pienso o cereal, la postura aumentará en torno a los 175 huevos, pudiendo superar los 200 en sistemas más convencionales de explotación pero siempre sin encerrarlas en jaulas.
Es cuestión de cada criador...

Gallo y gallinas Pedresas en libertad.
Esta gallina no quiere jaulas.
(c) Isaac Díaz Granel.

Los huevos pesan unos 53 gramos y son de color crema claro, característica esta última un tanto curiosa puesto que las gallinas del Tronco Mediterráneo ponen huevos blancos, lo que podría avalar el origen mestizo antiguo de las Pedresas.

Huevos de gallina Pedresa.
(c) Áurea Quintial.

Por su parte, la gallina Cántabra es de aptitud mixta huevos-carne. Ligeramente menos ponedora que la Pedresa, aunque con buena alimentación las producciones son similares, es una raza muy apta para la producción de pollos para el consumo que, aunque de crecimiento lento, tienen una carne excelente.
No quiere decir esto que la Pedresa sea mala para carne. Simplemente tienen una morfología diferente al tener masas musculares menos desarrolladas. 

Gallo Cántabro.
(c) Fernando Martín González.

Ambas razas pueden quedarse cluecas e incubar los huevos para que nazcan los pollitos y criarlos con gran esmero. 
La gallina Cántabra, como todas las semipesadas, es una excelente madre.


Arriba: Gallinas Cántabras incubando.
Abajo: Gallina Cántabra con sus pollitos.
(c) Fernando Martín González.

Los pollitos al nacer, presentan un plumón muy oscuro, adquiriendo el plumaje típico de cada al desarrollar las plumas definitivas. El color, variará en el caso de las Cántabras entre el barrado típico y el barrado nevado.
Los pollitos de cuello pelado de la gallina Cántabra, nacen ya con el cuello desprovisto de plumón.


Arriba: Pollitos pequeños. En la parte superior de la imahen pollitos recién nacidos y en la parte inferior pollitos de más edad en los que ya se empieza a apreciar el pluma adulto.
Abajo: Pollitos ya desarrollados con su plumaje adulto.
(c) Fernando Martín González.

CONCLUSIÓN
De todo lo expuesto, podemos sacar como conclusión que en Cantabria existen dos razas autóctonas de gallina similares en cuanto a su plumaje pero diferentes en cuanto a su morfología.
- Pedresa: Gallina ligera y de orejilla blanca oficialmente reconocida.
- Cántabra: Gallina semipesada y de orejilla roja que no está reconocida.

En cualquier caso, estas dos gallinas forman parte del patrimonio ganadero y cultural del pueblo cántabro y por ello merecen ser conservadas por todos los medios.

Gallina Cántabra.
(c) Fernando Martín González.

Fdo: Silvestre de la Calle García.
Técnico Forestal.

2 comentarios:

  1. Muy buen artículo,detallado y minucioso,he aprendido mucho sobre estas gallinas,cosas que, aún teniéndolas siempre en casa,no sabía,y eso se agradece y mucho, enhorabuena por éste trabajo 👌

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tu colaboración ha sido clave para poder realizar este reportaje. Muchísimas gracias.

      Eliminar

EL MACHO CABRÍO

El MACHO CABRÍO cumple una función fundamental en el rebaño pues la rentabilidad del mismo depende de que las cabras se queden preñadas y pa...