martes, 2 de enero de 2024

NATURALISTA Y TRASHUMANTE. HOMENAJE A JESÚS GARZÓN HEYDT.

Jesús Garzón Heydt (1946-2023) ha destacado por ser uno de los principales naturalistas españoles de las últimas décadas y un gran defensor de la milenaria práctica ganadera de la trashumancia.
El día 23 de diciembre de 2023 falleció en Cantabria, donde residía habitualmente aunque buena parte de su vida profesional se desarrolló en Extremadura y Madrid.


El currículum de Suso, como le conocían sus familiares y amigos, era verdaderamente abultado y espectacular desde que siendo sólo un adolescente allá por los años 60, se convirtiese en un importante colaborador de Félix Rodríguez de la Fuente.
Hasta 1992 Suso dedicó la mayor parte de sus esfuerzos a la protección y conservación de la naturaleza tanto a nivel nacional como internacional, destacando fundamentalmente los trabajos realizados en Extremadura.

Buitre Negro.
(c) Miguel Alba Vegas.

Desde 1992, aunque nunca dejó de lado su labor como naturalista, se centró en la promoción y defensa de la trashumancia, milenaria práctica tradicional que, ante los avances desordenados de la sociedad, corría el riesgo de desaparecer y de perderse así una parte importantísima de la cultura ibérica.

Ovejas trashumantes.
(c) Miguel Alba Vegas.

SUSO, EL NATURALISTA.
Desde su juventud, Suso Garzón llevó a cabo infinidad de trabajos de investigación faunística, protección de la naturaleza y gestión del medio ambiente lo que le llevó a realizar infinidad de publicaciones científicas tanto a nivel nacional como internacional.
Sería imposible por razones de espacio publicarlas en este sencillo artículo.
Su labor fue intensamente reconocida a nivel nacional e internacional, recibiendo a lo largo de su carrera numerosos premios y honores.

Lobo ibérico.
(c) Leticia Pato Martín.

Incansable fue el trabajo como naturalista que Suso realizó en Extremadura pudiendo destacar como uno de sus mayores logros, la conservación y declaración como espacio protegido del Parque Natural de Monfragüe que, con el paso del tiempo, pasaría a ser Parque Nacional y a destacar como un auténtico paraíso ornitológico.
Posiblemente, la creación de este espacio protegido sea el mayor de los logros de Suso como naturalista y por ello muchos se refieren a él como "el padre de Monfragüe".

Buitres negros.
(c) Miguel Alba Vegas.

SUSO, EL TRASHUMANTE.
Suso fue siempre consciente de la importancia que tenía la trashumancia para la conservación de la biodiversidad así como de un rico patrimonio cultural, lo que le llevaría centrar sus esfuerzos durante las tres últimas décadas en preservar y promover este milenario sistema de explotación ganadera totalmente respetuoso con el medio ambiente.

Ovejas trashumantes atravesando Madrid.
(c) Silvestre de la Calle García.

A Suso se debe en gran medida la recuperación de las vías pecuarias españolas y a que muchos ganaderos que había dejado de trashumar a pie por cañadas, cordeles y veredas debido a las dificultades que encontraban, volviesen a hacerlo.
Sin duda alguna, aquel viaje emprendido por Suso y el ganadero Cesáreo Rey para atravesar Madrid con un rebaño de 2000 ovejas, marcó un hito en la historia moderna de la trashumancia.

Ovejas trashumantes.
(c) Miguel Alba Vegas.

Y es que si muchos, dada la gran importancia de Suso como naturalista se refieren a él como el "padre" de Monfragüe, podemos decir que, pese a ser la trashumancia una práctica milenaria, Suso ha sido también el "padre" de la trashumancia en tiempos modernos y, en gran medida, gracias a él la UNESCO declaró como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad unos días antes de que Suso nos dejara.

Cabras y ovejas trashumantes.
(c) Miguel Alba Vegas.

CARGOS DE SUSO.
Desde comienzos de los años 70 hasta su muerte, Suso ostentó infinidad de cargos al haber sido fundador de un gran número de asociaciones de las cuales para la defensa de naturaleza y de la trashumancia, además de ser entre 1984 y 1989 Director General de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura. 

Cigüeña blanca.
Uno de los iconos de la naturaleza extremeña.
(c) Miguel Alba Vegas.

Fue además fundador de gran número de Asociaciones para la defensa de la naturaleza y la trashumancia, ostentando en ellas cargos como presidente y vicepresidente durante largos periodos.
Podemos citar entre ellas:

- Asociación de Estudios y Defensa de la Naturaleza (AEPDEN).

- Asociación para la Defensa de la Naturaleza y los Recursos Naturales de Extremadura (ADENEX).

- Asociación para la Defensa de los Recursos Naturales de Cantabria (ARCA)

Águila Real.
(c) Miguel Alba Vegas.

- Asociación Concejo de la Mesta para el Desarrollo Sostenible y Conservación de la Biodiversidad mediante la Ganadería Trashumante.

- Asociación La Raya para la Conservación de los Recursos Naturales y Culturales de las comarcas Fronterizas de España y Portugal.

- Asociación Tudanca para la Conservación de Razas Autóctonas y el Desarrollo Rural Sostenible en la Cornisa Cantábrica.

- Asociación Trashumancia y Naturaleza para la Protección y Conservación de la Red Nacional de Vías Pecuarias.

Vacas trashumantes.
Puerto de Tornavacas (Cáceres)
(c) Silvestre de la Calle García.

MI RELACIÓN CON SUSO.
El lector que lo desee, podrá encontrar en Internet muchísima información sobre Jesús Garzón Heydt y no es cuestión de copiar y pegar aquí todo lo que hay he hecho repitiendo así lo que otros han escrito.
Por ello, me centraré en la relación que tuve con Suso cuyo trabajo fue decisivo para entender en gran medida la existencia de EL CUADERNO DE SILVESTRE.

Silvestre de la Calle y Suso Garzón.
Meruelo (Cantabria) 2022.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Entre 1984 y 1989, Suso Garzón fue Director General de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura.
Por aquel entonces, preocupaba especialmente la situación en la que se encontraba la cabra montés que, en la provincia de Cáceres sólo habitaba en las zonas más altas del noreste de la misma, desde Tornavacas a Madrigal de La Vera.
Mientras que en en poblaciones como Madrigal y Villanueva, las monteses habitaban en cotos privados donde la rigurosa gestión cinegética garantizaba su supervivencia, fuera de los mismos había sido cazada hasta casi su extinción.
Por ello, gracias a las gestiones de Suso, se declaró en 1985 parte de los términos municipales de Tornavacas, Jarandilla de la Vera y Losar de la Vera, y todo el término de Guijo de Santa Bárbara como Zona de Caza Controlada conocida con el nombre de "La Sierra", ampliándose en 1985 con la inclusión de parte del término municipal de Viandar de la Vera.

Cabras monteses.
(c) Silvestre de la Calle García.

Cuando se declaró Zona de Caza Controlada, "La Sierra" contaba con un censo de tan sólo 35 ejemplares entre cabras, machos y chivos, viendo la mayoría de ellos en Guijo de Santa Bárbara, dentro de la denominada Dehesa Sierra de Jaranda, una finca de multitud de propietarios que estaba gestionada por una junta de administradores entre los que se encontraba mi abuelo materno Juan García García.

Mi abuelo Juan con una de sus vacas.
(c) José García de la Calle.

Como ocurría en otras muchas zonas de España, los propietarios de las grandes fincas esencialmente ganaderas, no eran conscientes del peligro de desaparecer que corrían ciertas especies como la cabra montés.
En Guijo de Santa Bárbara, las había habido de toda la vida y mi abuelo como cabrero, pastor y luego vaquero y administrador de la Sierra, las había visto siempre aunque, es verdad, que como él mismo decía cada año había menos.
Suso ayudó a los propietarios de los terrenos de la Zona de Caza Controlada a entender lo que suponía salvar a la cabra montés.

Cabra montés.
(c) Silvestre de la Calle García.

Desde 1985, la caza de cabras monteses quedó terminantemente prohibida pero se siguieron cazando otras especies como el jabalí y el ciervo para evitar daños a la agricultura y la ganadería y se siguió permitiendo el pastoreo tradicional de vacas y cabras, actividad fundamental para todos los pueblos que formaban parte de "La Sierra" y especialmente para Guijo de Santa Bárbara.

Piara de cabras.
Guijo de Santa Bárbara (Cáceres)
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Las gestiones de Suso dieron su fruto pues en 2001, la población de cabra montés en "La Sierra" se había recuperado totalmente, rondando los 3000 ejemplares, lo que permitió que se crease la Reserva de Caza "La Sierra" para poder realizar el aprovechamiento cinegético de la cabra montés pero manteniendo en todo momento los usos tradicionales como el pastoreo de cabras y vacas.
En aquel momento, Alonso de la Calle Hidalgo (mi padre) era ya administrador de la Dehesa Sierra de Jaranda puesto que había comenzado a desempeñar dicho cargo en 1998 y aún lo sigue desempeñando en la actualidad.

Mi padre y Suso Garzón.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

La Reserva de Caza la Sierra se ha convertido en un espacio natural de primer orden al encontrarse dentro de la RED NATURA 2000 y contar con la etiqueta de calidad WILDLIFE ESTATES/COTO FAUNÍSTICO por compaginar a la perfección la conservación del medio natural, el aprovechamiento de los recursos naturales mediante el pastoreo extensivo y el aprovechamiento cinegético de la cabra montés y otras especies.

Machos monteses.
(c) Silvestre de la Calle García.

Todo esto tuvo como resultado la apertura en 2009 del Centro de Interpretación de la Reserva de Caza "La Sierra" en Guijo de Santa Bárbara, un auténtico museo de la cabra montés, la naturaleza y la vida tradicional de la zona, constituyendo uno de los principales atractivos turísticos del municipio.

Centro de Interpretación de la Reserva de Caza La Sierra.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

La caza de la cabra montés se lleva a cabo para controlar la población de la especie al carecer prácticamente de depredadores naturales. Si no se realizasen acciones cinegéticas, se produciría superpoblación de la especie y daños tanto al ecosistema como a la cabaña ganadera de la zona.
El beneficio económico obtenido de la caza repercute tanto en la Junta de Extremadura como en los propietarios de los terrenos y en los Ayuntamientos, permitiendo la fijación de población en el medio rural.
Estos pueblos, deben agradecer la labor de Suso Garzón durante sus años como Director General de Medio Ambiente de la Junta de Extremadura.

Macho montés.
(c) Silvestre de la Calle García.

Como hemos dicho, además de como un gran naturalista, Suso Garzón destacó como gran defensor de la trashumancia, habiendo dedicado las tres últimas décadas a preservar y promover esta milenaria práctica ganadera que, en pueblos como Guijo de Santa Bárbara, llevan siglos siendo el principal medio de vida de sus habitantes.
Por ese motivo, en 2007 la corporación municipal guijeña presidida por Don Francisco Bernardo Huertas, decidió celebrar la I FIESTA DE LA TRASHUMANCIA a la cual acudió Suso como invitado especial.

Vacas trashumantes atravesando el río Tiétar.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

En aquella ocasión, Suso dio una de sus magistrales charlas sobre las Vías Pecuarias y recordó también las gestiones que realizó durante sus años como Director General de Medio Ambiente para declarar la Zona de Caza Controlada "La Sierra", sabiendo ya desde entonces que Guijo de Santa Bárbara era un pueblo ganadero.
También se proyectaron unos documentales sobre LOS CABREROS y LOS VAQUEROS dirigidos y realizados por mi padre y que llamaron la atención de Suso, que quedó especialmente maravillado por las imágenes de la piara de cabras de José Montero, uno de los últimos cabreros trashumantes de la comarca de La Vera.

Escena del documental LOS CABREROS.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

En aquella ocasión, se hizo un homenaje a los ganaderos guijeños en activo o recientemente jubilados pero también se hizo una lista para mencionar a todos los ganaderos conocidos en las últimas décadas: cabreros, borregueros y vaqueros.
De esto nos encargamos Crisantos Leal (Tito el Borrega) antiguo ganadero, María Antonia Rodríguez, concejala y antigua ganadera y yo, que por aquel entonces había terminado mis estudios de bachillerato y estaba decidido a comenzar mi formación como Técnico Forestal en Navalmoral de la Mata.

Silvestre de la Calle, Crisantos Leal y María Antonia Rodríguez.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Largo y tendido hablé con Suso en aquella ocasión en la que le conocí personalmente, pues hasta entonces sólo conocía sus hazañas de oídas tanto en Extremadura como en Cantabria donde compartíamos amistades comunes ya por aquel entonces.
Se sorprendió gratamente que alguien tan joven como yo, que apenas tenía 19 años en aquel momento, se interesase tanto por la naturaleza y la ganadería trashumante pero, como yo mismo le dije: he tenido buenos maestros.

Con mi tía Nicolasa y mi abuelo Juan.
Ganaderos.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Ya habiendo terminado mis estudios y cuando ya comencé a realizar investigaciones sobre razas autóctonas y cultura tradicional, publicando artículos en diversas revistas y dando charlas en diversos pueblos, coincidí varias veces con Suso con quien mi padre y yo manteníamos contacto telefónico regular.
Hablamos en cierta ocasión de la raza caprina Guisandera o Guisandesa, sobre la que a finales del siglo XX y comienzos del XXI, se habían hecho varios estudios que incluso habían sido publicados en la Revista FEAGAS y en la maravillosa colección de libros especializados editados por esta misma Asociación, pero que lamentablemente habían servido de poco, estando esta cabra autóctona del sur de Ávila en una situación verdaderamente crítica.

Cabra Guisandera.
(c) Silvestre de la Calle García.

Comentamos la difícil situación en la que vivía una de las últimas familias dedicadas a la cría de estas cabras. 
Se trataba de la ganadería de Fidel García Blázquez, de Guisando (Ávila), el cual tenía grandes dificultades para pastorear su piara debido a la invasión de las vías pecuarias y a la crisis económica generalizada, consiguiendo Suso que a través de las Asociaciones a las que él pertenecía y muchas de las cuales habían sido fundadas por él mismo y en las que ostentaba el cargo de presidente, ayudasen a este ganadero abulense que, a día de hoy, puede seguir manteniendo el rebaño en gran medida gracias a Suso Garzón.

Cabras Guisanderas durante la trashumancia de verano.
Guisando (Ávila)
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Yo seguí realizando estudios sobre ganadería y cultura tradicional durante años, hasta que en 2021 comencé a publicar este blog de EL CUADERNO DE SILVESTRE, poniéndolo en conocimiento de Suso que, como no podía ser de otra manera, alabó esta iniciativa.
Desde un principio, un grupo de ganaderos cántabros fueron colaboradores activos del blog como Carlos Fidel Vejo y Teresa Callejo (1980-2022) así como Miguel Alba Vegas, fotógrafo abulense pero especialmente vinculado a Cantabria.
Publiqué artículos sobre la vaca Tudanca o la vaca Casina.

Teresa y Carlos, colaboradores de EL CUADERNO DE SILVESTRE.
(c) Miguel Alba Vegas.

Pero mi relación con Cantabria, esa tierra a la que tanto amo al igual que Suso, ha sido aún más estrecha desde que por circunstancias de la vida contacté con la gran Áurea Quintial, ganadera dedicada a la cría de vacas de raza Pasiega. Áurea me puso en contacto con otros ganaderos como Sergio Canales mientras que yo por mi parte contacté con otro gran ganadero como es Gaspar Guas Fernández, cabrero del Asón. Así comenzó a tejerse una tupida red que nos llevó a todos a juntarnos en el I ENCUENTRO DE RAZAS AUTÓCTONAS AMENAZADAS PRESENTES EN CANTABRIA que se celebró en Meruelo en 2022.

Suso Garzón, Silvestre de la Calle y Sergio Canales.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Yo participé en el citado Encuentro como presentador y como ponente, encargándome de presentar y agradecer la presencia de los políticos asistentes y de presentar a cada uno de los ponentes hablando algo sobre la raza autóctona de la que trataría cada ponencia.
También me tocó a hacer una ponencia sobre la cabra del Asón, raza caprina autóctona de Cantabria pero sin reconocimiento oficial.

Presentando el Encuentro de razas.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Con su cuaderno en mano para tomar las notas pertinentes, Suso escuchó con gran atención cada una de las ponencias pero mostrando gran interés por la cabra del Asón ya que el resto de razas (vacas Tudanca, Pasiega y Mochina, caballos Hispano-Bretón y Monchino, oveja Carranzana de cara negra y gallina Cántabra) son razas reconocidas oficialmente o, en el caso de la gallina Cántabra, bastante conocidas, mientras que la cabra era únicamente conocida hasta ese momento por un puñado de cabreros y gente mayor del oriente de Cantabria.

Suso Garzón en el Encuentro.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

Aquel día, 23 de septiembre de 2022, me despedí de Suso diciendo que nos volveríamos a ver pronto. Suso me dijo que le informase de los avances que realizásemos con la cabra del Asón puesto que él estaba también ayudando a otros ganaderos para que la oveja Blanca de la Peña fuese reconocida también como raza.

Hasta siempre Suso.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.

A lo largo de este tiempo, hemos tenido contacto telefónico aunque escaso debido a las circunstancias de la vida hasta que hace algo menos de un mes, mi padre y yo recibimos una llamada de Suso. 
Hablamos de trashumancia, de la cabra del Asón y de nuestros temas de siempre, pero el motivo real de la llamada era otro bien distinto:
Suso llamaba para despedirse pues sabía que el final de su caminar por cañadas, cordeles y veredas llegaba a su fin tras una larga enfermedad.
El día de Nochebuena, como tantos y tantos amantes de la naturaleza y de la trashumancia, nos enterábamos del triste fallecimiento de Suso, precisamente en una época del año en la que muchas vacas, cabras y ovejas recorrían las vías pecuarias camino de los pastos de invierno o de las cuadras donde permanecerán hasta la próxima primavera para repetir el ciclo trashumante, un ciclo que Suso, lamentablemente, ya no podrá ver.

Vacas Tudancas.
(c) Carlos Fidel Vejo.

Suso se marcha dejando un gran legado.
Gracias a él siguen las grullas emitiendo su estridente canto en los encinares extremeños y en los cielos del Parque Nacional de Monfragüe se contempla la enorme y majestuosa silueta del buitre negro mientras que en las planicies ibéricas siguen los "barbones" (machos de avutarda) realizando su espectacular cortejo...
Gracias a Suso aúllan los lobos en Zamora, cantan los urogallos en Asturias y los machos monteses hacen resonar sus topetazos por las serranías de Gredos.
Centenares de ovejas, vacas y cabras siguen transitando por las vías pecuarias españolas gracias a la protección de Suso. Resonarán siempre sus cencerros tras bajar de la montaña al llano y ese alegre tintineo para algunos a otros nos servirá para escuchar....

HASTA SIEMPRE, SUSO

Ovejas bajando del monte.
(c) Miguel Alba Vegas.

Fdo: Silvestre de la Calle García.
Técnico forestal especializado en ganadería extensiva y razas autóctonas. 
Cronista Oficial de Guijo de Santa Bárbara 

4 comentarios:

  1. Miguel Carbayo Perez3 de enero de 2024, 20:30

    Enhorabuena por el artículo dedicado a suso. Tuve la suerte de conocerlo, no tan en profundidad con usted, pero fue y será un referente. Si buen, hay que matizar que la gestión de monfrague está siendo, cuanto menos ,cuestionable y el número de lobos en Zamora un serio problema para la tan alabada ganadería extensiva. Es gratificante ver a gente joven como nosotros querer ver resurgir la ganadería como un modelo de gestión territorial fundamental para mantener la población y las zonas rurales habitadas y que cuiden del ecosistema igual que lo hizo Suso. Un saludo.

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  2. La oveja blanca de la Peña va ser reconocida como raza? Nunca había oído hablar de ella.

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