LA BORRASCA DE CECLAVÍN
Ceclavín es una localidad de unos 1780 habitantes perteneciente a la Mancomunidad Rivera de Fresnedosa y situada en el centro-oeste de la provincia de Cáceres.
Dentro de su rico patrimonio etnográfico destaca la singularísima fiesta de LA BORRASCA que se celebra los días 23, 26 y 27 de diciembre y en la que los grandes protagonistas son las cabras y los caballos.
Cartel de La Borrasca.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
La fiesta de La Borrasca se divide en dos grandes actos por así decirlo en medio de los cuales tiene lugar la celebración de la Natividad del Señor o Navidad lo que hace que esta fiesta ceclavinera tenga un particular carácter entre lo religioso y lo profano.
El primer acto, que tiene lugar el 23 de diciembre, recibe el nombre de Día o Fiesta de La Machorrita mientras que el segundo acto, los días 26 y 27 de diciembre tienen lugar las carreras de caballos.
Cartel de La Borrasca 2023
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Comencemos con La Machorrita.
El día 23 de diciembre, las borrascas, denominación que reciben los grupos o "peñas" de amigos que dan nombre al conjunto de la Fiesta, van a las majadas de los cabreros para buscar una cabra, tradicionalmente una machorra y de ahí el nombre de machorrita, para llevarla al pueblo.
Ceclavín cuenta con un extenso término municipal de 159,49 km cuadrados y en él hay censadas alrededor de 1000 cabras de las cuales unas 600 pastan en la dehesa municipal.
Rebaño de cabras.
(c) Gonzalo Lorenzo Gómez.
En los rebaños de cabras nacen con cierta frecuencia hembras estériles que llegado el momento de reproducirse no salen en celo y no se quedan preñadas por lo que entre los 12 y 24 meses, edad a la que todas las cabras deben haber parido al menos una vez, los ganaderos las venden para su sacrificio.
Rebaño de cabras comiendo.
(c) Gonzalo Lorenzo Gómez.
Tradicionalmente, los cabreros ceclavineros reservaban estas cabras para venderlas llegada la fecha de La Borrasca para que fuesen sacrificadas por cada borrasca para elaborar con su carne la cena de Nochebuena.
El 23 de diciembre, la machorrita era primorosamente engalanada con un collar de hojas de laurel y guindas (pimientos rojos secos), se le colocaba también una ristra de ajos y unas alforjas en la que se metían diversos manjares que se servirían en la cena del día 24.
Machorrita engalanada.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Con la Machorrita debidamente engalanada, cada borrasca recorría el pueblo con instrumentos como almireces, botellas, tamboriles...cantando las canciones populares de su extenso y rico cancionero y villancicos por estar ya en la antesala de las fiestas navideñas. También se componían coplillas alusivas a los acontecimientos que habían tenido lugar en el pueblo a lo largo del año.
Una Machorrita durante la noche del 23 de diciembre.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Tras pasar toda la noche de fiesta, al día siguiente la cabra era sacrificada y con su carne se preparaba la cena para toda la gente de la borrasca.
La forma más tradicional de cocinar o guisar la carne de cabra es en caldereta, guiso en el que la carne se sofríe en aceite de oliva y al que se añaden esos ingredientes que adornan a la Machorrita como son el ajo, el laurel o las guindas secas entre otros.
Elaboración tradicional de la caldereta de cabra.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.
Hoy en día, la celebración de La Machorrita continúa realizándose pero con cambios sustanciales, ya que la cabra no es sacrificada sino que tras el desfile del día 23, es devuelta a su dueño.
En ningún momento la cabra es maltratada puesto que es tratada con sumo cariño preocupándose los miembros de la borrasca de que no sufra el más mínimo daño.
Machorrita.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Actualmente, las borrascas se esmeran mucho en engalanar a su Machorrita puesto que se celebra un concurso para ver cuál es la más bonita de todas, estableciéndose un sistema de puntuación riguroso.
Algunas borrascas engalanan un carnero para este singular desfile, pudiendo el animal participar en la Fiesta pero no en el concurso puesto que la Machorrita debe ser una cabra, independientemente de que sea o no machorra, la cual deberá ser engalanada de la manera tradicional con el laurel, las guindas, ajos, naranjas y las clásicas alforjas y no disfrazada de otra forma.
De esta forma, el 23 de diciembre hacia las 7 de la tarde y tras el correspondiente pregón del alcalde, comienza la Fiesta de la Machorrita que se prolongará hasta bien avanzada la noche, para luego llevar a las cabras de nuevo a sus majadas.
Pequeña Machorrita engalanada de forma tradicional.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
El origen de esta tradición ceclavinera es desconocido pero muy antiguo. No hay documentos escritos que hablen del origen de La Machorrita pero es algo que se recuerda de toda la vida.
Sí que es mencionada la fiesta en periódicos como NUEVO DÍA de Cáceres donde se habla ya en 1927 de su celebración.
Publicación de 1927.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Sin embargo, para conocer el posible origen de la Machorrita dentro de las Fiestas de LA BORRASCA, debemos analizar la gran importancia que ha tenido La cabra en Extremadura durante siglos e incluso milenios, trascendiendo esa importancia más allá del plano meramente económica y llegando a influir en la sociedad, la historia y la cultura tradicional de la región.
Rebaño de cabras en la dehesa extremeña.
(c) Dioni Prieto Cuarto.
En época prerromana, los lusitanos y vetones, pueblos guerreros y ganaderos que habitaban en la zona donde hoy se encuentra la localidad de Ceclavín, rendían culto a Ataecina, diosa de la fertilidad y del renacer, estando esta importante deidad asociada a la cabra.
Posiblemente, en estas fechas cercanas al solsticio de invierno, cuando los días comienzan a ser más largos, se sacrificasen cabras como tributo a la diosa Ataecina eligiendo para ello las reses más gordas, fuertes y de mejor estampa de todo el rebaño, siendo las elegidas, sin duda alguna, las soberbias machorras.
Cabra Machorra.
(c) Silvestre de la Calle García.
Posiblemente sin saberlo y con un motivo totalmente diferente porque ya no se rinde culto a la Diosa Ataecina ni se sacrifica a la cabra, los ceclavineros celebran una fiesta de orígenes antiquísimos y que, por lo tanto, merece ser conocida, fomentada y reconocida debidamente.
Machorrita ante un cartel de Ceclavín.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Tras el Día de La Machorrita, se produce un breve "parón" en la Fiesta de LA BORRASCA, coincidiendo con el 24 y 25 de diciembre, días de reunión familiar y de adoración al Hijo de Dios nacido en el Portal de Belén.
Portal de Belén.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
En Ceclavín, como en muchos otros pueblos, está muy arraigada la tradición de colocar el Portal de Belén tanto en las casas particulares, en las iglesias y ermitas y en los edificios públicos. En estos Portales de Belén, no falta la figura de La Machorrita.
La Machorrita en el Portal de Belén.
Ermita de la Virgen del Encinar.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Algunos vecinos tienen en sus casas figuras decorativas de La Machorrita, las cuales son colocadas en Navidad en el Portal de Belén y durante el resto del año en un lugar destacado de la casa para recordar que el 23 de diciembre se celebrará nuevamente el día de La Machorrita.
Figura de una Machorrita en una casa del pueblo.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Pasados estos dos días de fiesta navideña en los que el espíritu de La Borrasca sigue vivo en las casas ceclavineras, la Fiesta continúa con Los Días de Caballos.
Carrera de los caballos.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Todo comienza cuando el día 26 de diciembre, los ceclavineros suben con sus caballos y carros hasta la Ermita de la Virgen del Encinar, Patrona y Alcaldesa Perpetua de la localidad de Ceclavín.
Numerosos vecinos acompañan a pie a los jinetes desde el pueblo hasta el citado templo.
Camino de la Ermita de la Virgen del Encinar.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Al llegar a la Ermita, los jinetes a lomos de sus caballos, rezan ante la Virgen del Encinar y acto seguido dan tres vueltas al templo en el sentido contrario a las agujas del reloj para pedir a la Patrona de la localidad que proteja a sus caballos durante la carrera y durante todo el año siguiente.
Jinetes rodeando la Ermita de la Virgen del Encinar.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Después, jinetes y vecinos regresan al pueblo donde el Ayuntamiento ofrece en la Plaza de España un aperitivo para todos los asistentes en el que no faltan la patatera, embutido típico extremeño, y los dulces como los clásicos coquillos.
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Jinetes, vecinos y visitantes en la Plaza de España de Ceclavín.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Y no puede faltar en una celebración ceclavinera, el famoso vino de pitarra elaborado en la localidad y que, según se cuenta, fue degustado ya en el Monasterio de Yuste por Carlos V en el siglo XVI.
Las botas de vino van pasando de mano en mano en un ambiente alegría y familiaridad.
Bebiendo de la bota.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Esperando el paso de los caballos.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Los jinetes recorren por parejas y a gran velocidad todo el recorrido ante la admiración de los vecinos y visitantes que disfrutan de esta espectacular carrera.
Carrera de caballos.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Al día siguiente, se repiten exactamente los mismos actos por lo que ceclavineros y visitantes disfrutan nuevamente del aperitivo y de las carreras al mismo tiempo que todos los devotos pueden rezar ante la Virgen del Encinar pidiendo su protección y dándole las gracias por todo lo bueno ocurrido en el año que toca a su fin y pidiendo para que al año siguiente puedan disfrutar todos de LA BORRASCA con La Machorrita y los Días de Caballos.
Virgen del Encinar.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
A primera vista, puede parecer que no hay relación alguna entre La Machorrita y los Días de Caballos, pero posiblemente el origen de ambas cosas sea el mismo.
Los lusitanos y vetones eran pueblos guerreros y muy belicosos para quienes el caballo, al igual que para otros pueblos peninsulares de época prerromana, tenía un papel realmente importante.
Con motivo de la celebración del solsticio y los rituales relacionados con la diosa Ataecina, los jóvenes guerreros realizarían carreras con sus caballos como símbolo de virilidad y fortaleza, demostrando que estaban sobradamente preparados para luchar contra los enemigos a lomos de sus velocísimos caballos, hijos de aquellas yeguas que, como contaban los autores clásicos, eran tan veloces que sólo el viento podía cubrirlas.
Yegua con su potrillo.
(c) Alonso de la Calle Hidalgo.
Los ceclavineros con su alcalde D. Arturo González Macías a la cabeza, son muy conscientes de la importancia que tiene su fiesta de LA BORRASCA y están luchando desde hace mucho tiempo por fomentarla y conservarla, tratado ahora de conseguir que sea declarada Fiesta de Interés Turístico Regional.
Cartel de LA BORRASCA 2023.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
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Presentación de LA BORRASCA 2023 en la Diputación Provincial de Cáceres.
Alcalde y concejales de Ceclavín con la Diputada Provincial de Turismo.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Es imposible mostrar en plena ciudad de Cáceres la Fiesta de La Borrasca con todos sus elementos y sobre todo con sus grandes protagonistas que son los caballos y las cabras aunque estas últimas son más pequeñas y manejables por lo que D. Arturo González Macías y algunos de sus concejales, acuden todos los años a la Diputación Provincial de Cáceres con una Machorrita debidamente engalanada.
Este organismo provincial con sus medios, da publicidad a la Fiesta de La Borrasca.
D. Arturo González Macías con la Machorrita en la Diputación.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Tanto se vuelca el Ayuntamiento de Ceclavín en defender su Fiesta, que ya cuentan con sus propias mascotas: Antón el caballo y Sebastiana la cabra.
Antón y Sebastiana.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Además de eso, el pueblo cuenta con dos monumentos dedicados a La Machorrita y al Día Caballos.
El primero de ellos, se encuentra en la Plaza de España y fue inaugurado el 23 de diciembre de 2019, es decir, el Día de La Machorrita.
Inauguración del Monumento de La Machorrita.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Se trata de la escultura de una cabra junto a un tamboril y una mesa con productos típicos, todo ello colocado sobre un pedestal en el que pueden leerse algunas de las coplas típicas que se cantan el día de La Machorrita.
Monumento de La Machorrita.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
El monumento al Día de Caballos fue inaugurado el 13 de abril de 2024 y se encuentra situado a la entrada del pueblo. Sobre un pequeño pedestal en el que se puede leer FIESTA DE LA BORRASCA DEL 23 AL 27 DE DICIEMBRE, hay colocadas dos esculturas de sendos jinetes corriendo a lomos de sus caballos.
D. Arturo González Macías junto al monumento de Los Caballos.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
Esta espectacular Fiesta, que como vemos es vivida con gran intensidad e ilusión por los ceclavineros y en la que todo visitante es tratado con un vecino más del pueblo, merece sin lugar a dudas ser reconocida como Fiesta de Interés Turístico Regional por el momento y en futuro seguir recibiendo más reconocimientos.
Machorrita.
(c) Ayuntamiento de Ceclavín.
AGRADECIMIENTOS:
- Al Excelentísimo Ayuntamiento de Ceclavín y especialmente a su alcalde D. Arturo González Macías que ha colaborado activamente desde el primer momento aportado toda la documentación y la mayoría de las fotografías que ilustran este artículo.
- A D. Gonzalo Lorenzo Gómez, ganadero y defensor de la cultura tradicional de la localidad de Acehúche (Cáceres).
BIBLIOGRAFÍA Y FUENTES CONSULTADAS.
- Dosier Técnico. Fiestas de La Borrasca. Propuesta de Fiesta de Interés Turístico. Ayuntamiento de Ceclavín.
- La Borrasca. Historia de una tradición ancestral. (2021) Ayuntamiento de Ceclavín.
- Herrero Uceda, M. y Herrero Uceda, E. (2012) Mi Extremadura. La Cultura Rural.
Fdo: Silvestre de la Calle García.
Técnico forestal especializado en Ganadería Extensiva y Razas Autóctonas.
Cronista Oficial de la Villa de Guijo de Santa Bárbara.
Miembro de RAECO (Real Asociación Española de Cronistas Oficiales).
Miembro de ACROEX (Asociación Oficial de Cronistas de Extremadura).
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